Los sensores de alarma son componentes esenciales en cualquier sistema de seguridad, diseñados para detectar movimientos, aperturas o vibraciones no deseadas en distintos ambientes. Permiten proteger accesos, puertas, ventanas y áreas interiores con gran efectividad. Se integran fácilmente a centrales de alarma, tanto cableadas como inalámbricas, y brindan una respuesta inmediata ante posibles intrusiones. Son ideales para hogares, oficinas, locales comerciales y espacios industriales, ofreciendo seguridad y tranquilidad las 24 horas.